Menú Cerrar

MÚSICA EN LAS ACACIAS Septiembre a junio

 

Música para niños y niñas (0-3 años)


Para los padres: Las clases de música para niños/as de 1 a 3 están pensadas también para los padres. La clase de música es el momento de la semana que nos regalamos para disfrutar de nuestros hijos/as y afianzar el vínculo desde esa edad tan temprana. Estimularles y cantar con ellos, tener en común juegos, canciones, rimas, masajes que luego podéis hacer en casa son los objetivos comunes que tiene esta actividad.


Expectativas: La clase de música siempre tiene que ser un lugar de tranquilidad y diversión. A tan temprana edad, no podemos pretender que sea una clase totalmente reglada y que los niños/as estén prestando atención al cien por cien durante toda la sesión. En clase nunca exigimos, sino que jugamos. Con paciencia y amor vamos consiguiendo los objetivos sin olvidar que el principal es que los niños/as estén felices. Cada niño/a tiene su momento de responder a las actividades y cada uno responde antes a la actividad que más le gusta. No debemos entrar en comparaciones con los demás niños/as. Disfrutemos y conozcamos la manera de expresarse de nuestros hijos/as.


Sesiones y duración: A tan temprana edad, es indispensable que repitamos rigurosamente la misma sesión un número determinado de veces. Hay que repetir para que reconozcan las actividades y tengan muchas oportunidades de intervenir y responder a los estímulos. No olvidemos que los niños/as a esta edad son muy vulnerables al entorno: un día nublado, tener sueño o estar cansado pueden ser el detonante para que ese día no estén del todo dispuestos. No pasa nada, haremos la sesión y la próxima vez responderá mejor.


Trabajo en casa: Todo el material que se aprende en clase debe estar apoyado con un trabajo en casa. Escuchar las audiciones, hacer los masajes antes de dormir, practicar los juegos didácticos que aprendemos en clase o bailar con los tíos o los abuelos en el salón son buenos ejemplos de cómo hacer que los niños/as tengan un ocio sano, divertido y educativo. Ese trabajo en casa se agradece en las sesiones y ayuda a que la actitud del niño/a al venir a clase sea positiva. Es muy importante que los niños/as vengan contentísimos a clase de música.


Actitud en clases: Los niños/as a esta edad sufren muchos cambios emocionales debido al crecimiento físico, mental y emocional tan acentuado que experimentan en sus primeros años de vida. Esto tiene unas consecuencias en el comportamiento. Si un niño/a llora mucho en clase, el padre deberá salir con él antes de que contagie el ánimo a los demás. Luego intentaremos que entre más calmado. Si un niño/a no está prestando atención a la actividad es mejor dejarle tranquilo un rato y que luego se incorpore por si mismo cuando vea como los demás nos lo pasamos bien, etc.


Contenido general de las clases


Cuento: El contenido de los cuentos es musical, los personajes responden a sonidos de instrumentos que luego tenemos que reconocer en ejercicios auditivos.


Esquema corporal: Trabajamos la coordinación y el reconocimiento de las partes del cuerpo con ejercicios. Al principio, en algunos ejercicios los padres son los que muestran cómo se hacen y luego los niños/as acaban por hacerlos solos a medida que van trabajando los ejercicios en clase y en casa. Los ejercicios son dinámicos y de un constante diálogo entre la profesora, los padres y los peques.


Conocimiento: Canciones y juegos nos harán descubrir nuestro entorno y reconocerlo.


Ritmo: En las primeras sesiones son ejercicios de estimulación en la que los peques intervienen de una forma más pasiva, los padres percuten pequeños ostinatos acompañando canciones que cantamos en clases. Siempre hay contacto con los instrumentos de pequeña percusión corporal y a medida que transcurren las sesiones cuando el niño/a se va familiarizando con los ritmos, pasan ellos mismos a trabajar ecos rítmicos, cualidades sonoras y pulso con juegos y material de percusión infantil. También trabajamos ritmos con rimas y juegos.


Audición: Aprender a escuchar música desde una temprana edad es quizás uno de los objetivos más importantes. El lenguaje hablado pasa a un segundo plano. Vamos a descubrir qué cuenta la música y qué sensaciones nos transmiten las melodías al sonar. Las audiciones se ambientan con juegos con movimientos que van en consonancia con lo que suena, con dramatizaciones de cuentos ambientados en la estructura de la obra, con movimientos en corro y sonidos que nos hagan reconocer la aparición de un animal en determinada audición, etc.


Danza: Bailar es un reflejo físico de lo que estamos escuchando. Es una herramienta divertida en la que se trabaja muchísimo la coordinación y los lazos afectivos entre los miembros del grupo. Además, con los ejercicios de baile son muy buenos para desarrollar la memoria musical. Que un niño/a reconozca la canción que suena y enseguida se ponga a moverse con los pasos aprendidos es algo que ocurre a pocas sesiones de empezar.


Masajes: Para los niños/as es el momento de relajación. Los primeros días cuesta un poco ponerles en posición pero cuando comprenden que van a recibir carantoñas se emocionan y empiezan a  dejarse hacer los masajitos. Para ayudar a crear el clima de relajación, podemos cantar una nana o una retaila y luego proceder a dar el masaje.
————–

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *