Las rutinas en la vida de los niños son más importantes de lo que te imaginas. Una de las cosas más importantes que puedes hacer para que tu hijo se sienta seguro es establecer rutinas en su vida. Los niños y los adultos, se sienten más seguros cuando sus vidas son predecibles. Cuando los adultos proporcionan entornos donde los niños pueden sentirse seguros, los niños aprenden a que pueden confiar en los demás para cuidar de ellos y satisfacer sus necesidades, por lo que llegan a ser libres y pueden relajarse para explorar su mundo.
Los niños pequeños no comprenden de forma plena el concepto de tiempo, no ordenan sus vidas en horas y minutos, sino que lo hacen más bien por los acontecimientos que van sucediendo. Cuando los eventos suceden en el mismo orden todos los días, los niños tienen una mejor comprensión del mundo, por lo que se sienten más seguros.
Un horario regular dará a los niños una forma de ordenar y organizar sus vidas. Cuando los niños pequeños saben qué esperar, tendrán más confianza en sí mismos y en el mundo que les rodea. Ellos sabrán que no se enfrentarán a tareas poco comunes para las que no están preparados.
El cerebro de un niño de corta edad estará aún en fase de desarrollo importante, sobre todo la parte del cerebro que es capaz de planificar y realizar predicciones sobre el futuro. Una rutina ayuda a los niños a practicar y a hacer esas predicciones simples, así como para comprender conceptos tales como ‘antes y después’. Las rutinas también ayudan a los niños a desarrollar el autocontrol, ya que saben que tienen que esperar hasta cierto tiempo para hacer una actividad en particular. Un horario regular fomenta la responsabilidad y la independencia porque los niños serán capaces de realizar más actividades por su cuenta si han hecho las mismas actividades muchas veces antes en el mismo entorno.
Una rutina es especialmente importante sobre todo en épocas difíciles, como la hora de acostarse o vestirse por la mañana. Cuando hay una rutina en su lugar, suele haber poca discusión al respecto porque las expectativas de comportamiento se dan por sentadas. Por lo tanto, una ventaja importante de establecer rutinas es que se reducirá el estrés por sí mismo. Mantener una rutina puede parecer una tarea imposible cuando es difícil mantener un horario estructurado con los cambios que suelen haber en la familia, pero incluso la implementación de la rutina más pequeña puede marcar una gran diferencia.
Recuerda que nunca será demasiado tarde para establecer unas rutinas y que tú siempre serás su mayor ejemplo a seguir.
- Planificar al menos una comida al díadonde comáis toda la familia junta alrededor de la mesa.
- Tener una rutina para dormir, ayudará a que los niños se calmen y asocien esas actividades con irse a dormir.
- Trabajar juntos para entender las rutinas.Si tu hijo es pequeño puedes utilizar un tablón con fotos para poner en orden su estructura mental. Así será capaz de mirar las fotos y saber qué es lo que viene a continuación.
Cuanto antes empieces a ordenar la vida de tu hijo, más fácil será. Cuando se adhieren a una rutina, les enseñas a tus hijos a organizar el tiempo de forma mucho más eficiente, productiva y donde se reduce el estrés. El niño se sentirá seguro y le permitirá interiorizar formas para organizar su vida con flexibilidad a medida que crece.
Adoración Navarro.